El notario Toni Bosch nos comenta que surgen muchas dudas entre los herederos a la hora de la aceptación de herencia. Por una parte está todo el tema de la documentación a aportar y por otra parte las posibles deudas que tenga el fallecido para saber qué hay que pagar por la herencia. En su página web dedica un contenido especial para explicar toda la documentación y pasos a realizar al aceptar una herencia.
Renuncia a herencia
Renunciar a una herencia significa rechazar formal y legalmente la totalidad de los bienes, derechos y obligaciones que te corresponderían como heredero debido al fallecimiento de una persona. Al renunciar, el heredero renunciante no recibe ningún activo ni asume ninguna deuda u obligación asociada con la herencia.
Estas son algunas consideraciones importantes sobre la renuncia a una herencia:
- Acto voluntario: La renuncia es un acto voluntario y personal. Nadie puede ser obligado a aceptar o renunciar a una herencia.
- Formalidades: En la mayoría de las jurisdicciones, la renuncia debe hacerse de manera formal. Generalmente se hace mediante una declaración ante un notario o en el tribunal competente.
- Irrevocabilidad: Una vez que se ha renunciado a una herencia, la decisión suele ser definitiva e irrevocable. Esto significa que no puedes cambiar de opinión y reclamar la herencia en un momento posterior.
- Consecuencias de la renuncia: Al renunciar, no se adquieren bienes ni derechos. Aunque tampoco se asumen las deudas y obligaciones del fallecido. Tras la renuncia, la herencia se distribuye entre los herederos restantes como si el heredero renunciante nunca hubiera tenido derecho a ella.
- Consecuencias fiscales: Generalmente, renunciar a una herencia no tiene implicaciones fiscales para el heredero renunciante, ya que no ha adquirido ningún bien. Sin embargo, la renuncia tiene consecuencias fiscales para los demás herederos. Ya que éstos podrían recibir una porción mayor de la herencia.
- Plazo para renunciar: En muchas jurisdicciones, hay un plazo legal para decidir si se acepta o se renuncia a una herencia, una vez que se tiene conocimiento de la misma.
Motivos para renunciar a una herencia
Existen diversos motivos para renunciar a una herencia. Algunos de los más comunes son los siguientes:
- Deudas superan a los activos: Uno de los motivos principales para renunciar son las herencias con deudas. Es decir, cuando las deudas y obligaciones del fallecido superan el valor de los bienes heredados. Si una persona acepta la herencia en estas circunstancias (y no a beneficio de inventario), podría terminar siendo responsable de pagar esas deudas con su propio patrimonio.
- Complicaciones con propiedades: A veces, los bienes heredados son difíciles de administrar o vender, especialmente si se trata de propiedades en mal estado, propiedades en ubicaciones no deseadas o bienes con problemas legales pendientes.
- Evitar conflictos familiares: En algunas familias, aceptar o renunciar a una herencia generan tensiones o conflictos. Algunos eligen renunciar para evitar enfrentamientos o para garantizar que otros miembros de la familia, que quizás lo necesiten más, reciban una mayor parte.
- Beneficio de otros herederos: Hay situaciones en las que un heredero prefiera que su parte de la herencia pase directamente a otros herederos. Como por ejemplo sus propios hijos o nietos.
- Razones fiscales: En algunas jurisdicciones, los impuestos sobre las herencias son significativos. Aunque renunciar a una herencia para evitar impuestos no es siempre efectivo (y puede tener sus propias implicaciones fiscales). Algunas personas consideran esta opción, especialmente si los bienes heredados no tienen un valor sentimental o práctico para ellas.
- Razones emocionales o morales: Existen casos en los que la herencia provenga de una fuente o de una persona con la cual el heredero no quiere estar asociado por razones emocionales, éticas o morales.
- Desconocimiento o falta de interés: En casos donde el fallecido y el heredero no tenían una relación cercana o incluso desconocida, el heredero podría optar por renunciar simplemente por desconocimiento del patrimonio o falta de interés en el mismo.
- Posibles reclamaciones legales: Si existe la posibilidad de que la herencia sea objeto de litigios o reclamaciones legales en el futuro, algunos herederos optan por renunciar para evitar posibles complicaciones o disputas judiciales.
- Preservación de beneficios gubernamentales: En algunos casos, especialmente en jurisdicciones donde recibir una herencia afecta la elegibilidad para ciertos beneficios gubernamentales (como asistencia social), la persona podría optar por renunciar a la herencia para no perder esos beneficios.
Antes de renunciar a una herencia, es aconsejable consultar con un abogado especializado en derecho sucesorio para comprender completamente las implicaciones legales y las posibles consecuencias de la decisión.
